2013-02-09 L’Osservatore Romano
La libertad religiosa no es una amenaza sólo en aquellos países asiáticos y africanos sujetos a regímenes dictatoriales o fundamentalistas. Como es sabido, también en las modernas democracias occidentales, con formas más o menos encubiertas, el ejercicio de este derecho humano fundamental algunas veces se ve seriamente en peligro. Sucede por ello también en España, mientras un artefacto rudimentario fue descubierto y desactivado en la catedral de la Almudena de Madrid, el Observatorio para la libertad religiosa y de conciencia lanzó la alarma, dando a conocer cómo, durante el año 2012, tuvieron lugar en España dieciséis ataques a los símbolos religiosos, no sólo católicos, sino también evangélicos y musulmanes.
«Se evidencia así —sostiene el comunicado del Observatorio— la necesidad que hay en nuestra sociedad de establecer unos principios morales y legales para la defensa de este derecho fundamental, que es el de todos, creyentes y no creyentes, y que recoge nuestra Constitución en su artículo 16». El primero de estos ataques mencionado por el Observatorio se refiere a los estudiantes de la Universidad Complutense de Madrid, donde, el 22 de febrero del año pasado, el decano de la facultad de historia intentó relegar la capilla de la facultad a un aula de no más de cinco metros cuadrados, con la intención de arrinconar a los estudiantes que querían ejercer incluso dentro del ateneo su derecho a la libertad religiosa. A finales de 2012 —se evidencia ulteriormente— tal disposición luego se extendió a todas las capillas de la universidad, con la declarada intención de cerrarlas. Otro capítulo se refiere al intento de abolir la presencia de crucifijos en los lugares públicos. El Observatorio señala lo sucedido el 24 de febrero en Zaragoza, donde los representantes del partido Chunta Aragonesista demandaron que se retirara el símbolo cristiano del salón del Ayuntamiento.