San Roman el Melodista

Date: 
Viernes, Octubre 1, 2021

LA COMPOSICIÓN de himnos litúrgicos ha sido ocupación predilecta de muchos varones de Dios. San Román, a quien se venera como santo en el oriente, es el más grande de los compositores de himnos de la liturgia griega. Era originario de Ernesa de Siria y llegó a ser diácono de la iglesia de Beirut. Durante el reinado del emperador Anastasio I se trasladó a Constantinopla. Fuera de que escribió muchos himnos (algunos de ellos en forma de diálogo), no sabemos de su vida más de lo que narra la leyenda incluida en el "Menaion" griego. Una noche, la Santísima Virgen se le apareció en sueños, le entregó un rollo de papel y le dijo: "Toma y come". Así lo hizo el santo, en sueños. A la mañana siguiente, se despertó presa de un gran entusiasmo poético y se dirigió a la iglesia de la Santísima Madre de Dios, en Constantinopla para asis- tir a la liturgia de Navidad. En el momento en que se trasportaba en solemne procesión el libro de los Evangelios, San Román se aproximó al palio e improvisó el himno que comienza con las siguientes palabras: "El día de hoy la Virgen da a luz al Ser trascendente y la tierra ofrece refugio al Inaccesible. Que los ángeles se unan a los pastores para glorificar al Señor, y que los magos sigan la estrella, porque hoy nos ha nacido un niño que era Dios antes del comienzo del tiempo." En la actualidad, se canta todavía en el rito bizantino este resumen de la fiesta de la Natividad.

Se conservan unos ochenta himnos de San Román, aunque no todos completos. Son obras de intenso sentimiento y de estilo dramático. Desgraciadamente, como tantas otras composiciones literarias del rito bizantino, los himnos de San Román son con frecuencia demasiado extensos y rebuscados. Los temas, muy variados, proceden del Antiguo y del Nuevo Testamento y de las fiestas litúrgicas.

Alban Butler - Vida de los Santos