San Melar

Date: 
Viernes, Octubre 1, 2021

LA IGLESIA del gran monasterio de Amesbury, en el Wiltshire, estaba dedicada a Nuestra Señora y a San Melar y las supuestas reliquias del santo se conservaban ahí. Por otra parte, muchos pueblecitos del norte y del oeste de Inglaterra tenían por patrono a San Melar, así como tres iglesias de Cornwall: Mylor, Linkinhonre y Merther Mylor. La biografía medieval de San Melar Mártir, resumen de una obra francesa que fue probablemente escrita en Amesbury, afirma que el santo era hijo de Meliano, duque de Cornouailles, en Bretaña. Cuando Melar tenía siete años, su tío Rivoldo asesinó a Meliano y se apoderó del ducado. Inmediatamente mandó cortar a Melar la mano derecha y el pie izquierdo y le encerró en un monasterio. A los catorce años de edad, San Melar era ya tan famoso por sus milagros, que Rivoldo empezó a recelar de su poder. Así pues, Rivoldo pagó cierta suma a Cerialtano, el guardián del joven para que le diese muerte. El esbirro se encargó de cortarle la cabeza. El cadáver del santo obró varios milagros antes de recibir honrosa sepultura; uno de los principales fue la muerte inexplicable de su asesino. Muchos años más tarde, ciertos misioneros trasladaron las reliquias de San Melar a Amesbury y el cielo impidió, con milagros, que las sacasen de ahí. La leyenda que corría en Cornwall durante la Edad Media, era sustancialmente idéntica; sin embargo, el relato escrito por Grandisson, obispo de Exeter, sitúa los hechos en Devon y Cornwall. La leyenda bretona, tal como la redactó Alberto el Grande en el siglo XVII, es más larga y detallada, gracias al poder de invención del autor. El P. Duine consideraba la leyenda del príncipe mártir como "una fábula construida con ciertos elementos del folklore y de las pseudogenealogías célticas, según el gusto de las novelas hagiográficas de los siglos XI y XII". En el mejor de los casos, el único fundamento que puede tener la leyenda de San Melar es el asesinato de algún joven noble e inocente.

Durante el reinado de Atelstano, fueron trasladadas al sur y al oeste de Inglaterra las reliquias de muchos santos bretones. El canónigo G. H. Doble opina que las reliquias de San Melar fueron a dar a Amesbury y que a ello se debe la relación del santo con dicho sitio. El mismo autor piensa que el nombre de Mylor de Cornwall estaba relacionado originalmente con San Melorio (un obispo bretón) y no con el de San Melar. San Melorio dio su nombre a la población de Tréméloir. Era uno de los compañeros de San Sansón de Dol. La situación geográfica de las tres iglesias dedicadas a San Melar en Cornwall favorecen la hipótesis del vínculo con San Sansón. La fiesta patronal de Mylor de Falmouth se celebraba el 21 de agosto (no el l o el 3 de octubre, que son los días consagrados a San Melar), en tanto que la fiesta de Tréméloir ocurre el último domingo de agosto. No hay que confundir a San Melar y a San Melorio con San Maglorio (24 de octubre), por más que los tres nombres se deriven de la misma raíz. La tradición sitúa la muerte de San Melar en Lanmeur, de la diócesis de Dol. Se cuenta que el santo sustituyó por una mano de plata y por un pie de bronce los miembros que le habían sido cortados, y que tanto la mano como el pie de metal funcionaban como si fuesen de carne y hueso y aun crecían con el resto del cuerpo. Esta leyenda se aplica también a otros santos en el folklore céltico. La imagen de San Melar formaba parte de los frescos en la capi- lla del Colegio Inglés de Roma.

Alban Butler - Vida de los Santos