SE CUENTA que San Patricio, en el curso de su viaje de la localidad irlandesa de Saúl a la de Tara, se detuvo algunos días en la casa de un reyezuelo llamado Secnan, en Meath, y le convirtió con toda su familia. Las enseñanzas del santo impresionaron particularmente a Benigno, el hijo de Secnan. Se cuenta que el niño iba a dejar flores sobre el lecho de San Patricio cuando éste dormía. En el momento en que San Patricio se disponía a partir de Meath, Benigno se echó a sus pies y le rogó que le llevase consigo; así lo hizo el santo, y Be- nigno llegó a ser su discípulo más querido y su sucesor. San Benigno se distinguió por su bondad y buen carácter y por su habilidad en el canto; por eso, el pueblo le llamaba "el salmista de Patricio". A él se atribuye la evangelizaron de Clare y Kerry, de donde pasó más tarde a Connaught. Se cuenta también que San Patricio fundó una iglesia en Drumlease. en la diócesis de Kilmore, cuyo cuidado confió a San Benigno, quien la gobernó durante veinte años. Parece cierto que San Benigno era la mano derecha de San Patricio; juntos compusieron el código de leyes conocido con el nombre de Senchus Mor, y, después de la muerte de éste su discípulo se convirtió en el principal obispo de Irlanda.
Guillermo de Malmesbury cuenta que San Benigno renunció a su cargo el año 460 y se transladó a Glastonbury, donde se reunió con San Patricio. Su maestro le envió a vivir en una ermita y le ordenó que construyese su celda en el sitio en que su báculo floreciese. El milagro tuvo lugar en un sitio pantanoso, llamado Feringmere, donde murió y fue sepultado San Benigno. En 1901, sus reliquias fueron transladadas a la abadía de Glastonbury. Evidentemente que se transladaron los restos de un ser humano en esa ocasión, pero carece de valor histórico la leyenda que relaciona a San Patricio y San Be- nigno con Glastonbury.
Alban Butler - Vida de los Santos