Detrás de la función pública está siempre la familia, cordial encuentro del Papa con el personal del Quirinal

2013-11-14 Radio Vaticana
(RV).- Como estaba previsto, el Papa Francisco saludó también a los que trabajan en la residencia oficial de la presidencia italiana, acompañados de sus familiares, con numerosos niños que se le acercaron con alegría, en lo que fue un encuentro cordial, como subrayó el mismo Santo Padre, haciendo hincapié en que le gusta tanto el encuentro con los niños, que son muy importantes. Destacando el trabajo que desarrollan al servicio del presidente de Italia, deseó a estos empleados que tengan siempre un espíritu de acogida y de comprensión hacia todos, afianzados en un sentido de humanidad y con una atención solidaria, especialmente hacia los más débiles.
(CdM – RV)

Saludo completo del Papa:

«Le agradezco tanto, Señor Presidente, por la oportunidad de este encuentro familiar. Detrás de la función pública está siempre la familia: hijos, nietos. Me gusta tanto el encuentro con los niños; ¡ustedes son muy importantes! Y también los que desarrollan su trabajo al servicio del primer cargo institucional italiano. Los saludo de corazón y me alegra encontrarme con ustedes. Les deseo que vivan siempre en armonía con los que tienen en su alrededor, en familia y en cada ámbito de su vida cotidiana.

Mediante su trabajo, a menudo escondido pero precioso, ustedes están en contacto con los diversos eventos ordinarios y extraordinarios que marcan el camino de una Nación. Algunos de ustedes tienen la posibilidad de acercase a las diversas problemáticas sociales, familiares y personales, que los ciudadanos hacen llegar confiados al Presidente de la República. Les deseo que tengan siempre un espíritu de acogida y de comprensión hacia todos. Hay tanta necesidad de personas, como ustedes, que se empeñan con profesionalidad y también con un destacado sentido de humanidad y de comprensión, con una atención solidaria, especialmente hacia los más débiles. Los aliento a no desanimarse en las dificultades, sino a estar listos a sostenerse los unos con los otros.

Yo rezaré por ustedes, les aseguro mi oración, y les pido que recen por mí, lo necesito. ¡gracias!»